Querida mamá:
La huelga ha sido un desastre. Es mi opinión. La gente pelea
para saber si ha ganado los sindicatos o el gobierno. Se envían mensajes,
tuits, cuelgan informaciones en las redes sociales que hablan de cifras… y yo
me vuelvo a preguntar ¿para qué? ¿Si ganan los sindicatos ganamos nosotros? Y si
gana el gobierno ¿ganamos nosotros?
Pues sinceramente creo que hemos perdido todos. Cientos de
puertas, pintadas, basureros, neumáticos cortando el tráfico, coches
destrozados, lunas de negocios, bancos…etc, más la pérdida económica por dejar
de ganar dinero los negocios, más la cifra que quitan de las nóminas a quienes
no han ido a trabajar…. Esto es lo que realmente han conseguido los que han
organizado la huelga además de crear enfados entre vecinos y amigos que
pensaban de diferente manera.
Ya sabes que tu hija Ana está a punto de dar a luz, me pidió
que la acompañara al Carrefour para comprar algunas cosas que le faltaban. La
niña está malita y estaba con ella. Llamamos al Carrefour para saber si había
algo y dijo que no, que estaban funcionando con normalidad y que no había nadie
allí que creara problema. Decidimos ir y una vez dentro y ya puestas en las
cajas para pagar, entraron unas cien piquetes, pitando e insultando a todos los
trabajadores y quienes estábamos allí haciendo la compra. Lo primero que sentí
fue pánico por Adrianita. Tan pequeña me asustó pensar que pudiese ocurrir algo
pues aún tengo muy presente lo de Belén Langdon. La cogí en brazos y la metí
dentro del carro. La besé pidiéndole que se quedara tranquila mientras Ana le
cogía la manita. Pasaron gritándonos insultándonos y diciéndonos que no teníamos
que comprar. En ese momento, y sabes mamá que yo no soy así, si se me acercan
un centímetro más estaba dispuesta a pegarme con todo el que siguiera
insultándome. Entonces en ese mismo momento me di cuenta que ellos estaban
consiguiendo lo que yo sabía que podía ocurrir. Me di cuenta que iban a
conseguir lo que pienso que buscaban, el enfrentamiento, la pela, la “guerra”.
Así que le pedí a Ana que aligerara el paso lo que pudiese y marcharnos al
coche. Menos mal que lo hice. Me sentí furiosa porque yo respeto la decisión de
manifestarse, pero no respeto la forma de hacerlo. Se les ha ido de la mano.
En fin mamaíta. Ahora hoy ¿qué? ¿todo normal? La crisis
sigue igual por lo que para mí, insisto, la huelga ha sido mucho más
perjudicial que beneficiosa. Vamos a ver como transcurre el día de hoy. De salida tengo dentista, ya no me gusta el
inicio, pero hay que hacerlo.
Te quiero mucho, no me olvides….
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