Querida mamá:
Vaya vida más difícil de saber llevar… La muerte de tito
Manolo, la esperábamos…pero siempre cuesta aceptar estas cosas. Otro ángel
directo al cielo contigo. La verdad es que ha sufrido demasiado en los últimos
meses…y ya no era justo para él. Anoche en el tanatorio pensaba que realmente
no somos nadie… bueno, lo pienso desde hace ya varios meses…pero claro, estar
allí y sentir tan de cerca, de nuevo la muerte…
La verdad es que estoy abatida mamita, no sé bien qué decir.
Tengo tantos recuerdos de Tito…tantos buenos momentos vividos con ellos que me
parece mentira que ya se hayan acabado.
La familia, te podrás imaginar. Los hermanos fuimos todos a
acompañarla por unas horas. Hoy iré yo de nuevo por la mañana. Para pasar otro
rato con ellos en estos difíciles momentos. La tita parecía más entera, la
prima Dolo estaba destrozada… cuánto la entiendo. No hay palabras de consuelo
para esos momentos. Se lo dije tal como lo sentí. De nada sirve que te digan “ya
está descansando” “está mejor ahora” de nada mamita… y de eso sé yo un poco.
Cada uno asumimos nuestro dolor y lo interpretamos según los momentos
compartidos y el amor vivido. Yo sé que tú estás mejor, de eso estoy segura…porque
yo sé perfectamente todo lo que te tenía que dar para los dolores y las
terribles noches que sufrías…pero también sé ahora lo que es sentirse sola,
huérfana, triste, vacía… porque está papá, cierto…pero a veces como si no
estuviese. Está tan abatido que no es ni la mitad de lo que era… aunque muchas
noches, cuando está dormido me acuesto
rompo a llorar de pena de pensar que algún día no lo voy a tener. Si ahora
siento este dolor tan terrible en mi interior no quiero ni imaginar lo que
pueda sentir cuando él me falte…
Hoy se suponía que te iba a escribir algo bonito. Porque esta
tarde tenemos una visita especial en la Academia. Pero ya lo haré mañana. Hoy
merece el homenaje en la carta el tito. Seguro que ya estáis ahí los dos en
primera plana viéndonos a todos. Disfrutar de vuestra paz…lo merecéis.
Te quiero mamita, mucho. No me olvides. Ni a Pili.
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