viernes, 4 de octubre de 2013

4 de octubre; San Francisco y día mundial de la sonrisa.


Querida mamá:

Pues llegó el día. Ayer, como imaginaba y como te dije. Estos días están siendo largos e intensos. No es una queja, es información. Hay detalles del día que antes no se me pasaban y se me pasan. Por ejemplo, ayer me recordaron que era el cumpleaños de Juampi el día 9 y que mañana sábado lo celebramos en familia. No le había comprado el regalo. Y hoy sí que no voy a poder comprárselo. Así que corriendo a las 13:30 para comprarlo. Con tanto lío en la cabeza…

Ayer el móvil echaba humo. Cada vez que lo dejaba un momento en silencio porque me estaba molestando ya hasta el ruido, lo miraba y tenía 100 mensajes. Increíble. Los voluntarios empezaron a escribirme y a solicitarme el horario para ayudarme. Imagínate 20 personas pidiéndome horas sueltas en días concretos. Vamos, lo que te dije ayer, más difícil cuadrar el horario de los voluntarios que el de los niños. Pero bendito trabajo.

Y hoy es el día mundial de la sonrisa. Sonrisa que se me ha quitado de un plumazo cuando he tenido que pagarle a hacienda entre el IVA del alquiler y los impuestos 1.000 euros. El dolor es porque aunque sé que tengo que pagarlo y tenía el cuerpo medio preparado me parece muy injusto teniendo en cuenta que es todo lo ahorrado y que yo, y sólo yo, sé lo que me cuesta ahorrar un céntimo y soltarlo porque me consideran una actividad económica en la que gano dinero cuando no es así…pues me duele. Pero la verdad, prefiero estar en regla. Dios me lo dará por otro lado. Eso también lo tengo claro.

Así que una vez pagado todo y puesta al día, feliz porque hoy grabamos en la Rosaleda. Los niños emocionados, nerviosos, contentos… a ver qué tal nos sale. Yo tengo un nerviosismo en el estómago. Además me duele bastante la rodilla, pero la cosa está para quejarse. En la mañana de hoy quiero tenerla un poco de reposo para poder darlo todo hoy. Miedo me da que me pegue un crujido en mitad del baile. Anoche era que no podía ni doblarla. El dolor es fuerte. Yo me temo lo peor, pero vamos, que a esta la curo yo a base de pastillitas y pierna en alto. No piso un médico mientras me dure el dolor del hombro… que cada vez que paso por “reforma” me dejan peor que entré.

Bueno guapa, al lío. Por cierto, no sabes la ayuda que me está dando Carmen Abenza. Qué alegría me da mamá. Una mujer con los pies en el suelo y con más “poder” del que ella se cree. Lo que pasa es que es súper sencilla, muy llana, humilde. Y me aconseja, me ayuda, me apoya. Le he pedido que venga el día 8 a presentarme el libro. Yo sé que la idea te encantó. Bueno, en realidad fue de papá. No es que no e me ocurriera a mí, es que nunca pensé que fuese a aceptar. Tiene un trabajo el mismo día y va a intentar venir, pero bueno, solo el gesto de intentarlo, solo el que me llame, el que me anime… solo por eso me confirma que es tan grande como me decían. Me gusta sentirla cerca porque me siento más fuerte con el proyecto.

Te quiero mamita, no lo olvides ni me olvides. Acuérdate de papá, Isa, Carmenchu, María, JJ, Patricia y el cuñado.

P.D: Por cierto que hoy es el día de tu hijo Francisco y tu nieto Pacololo. Lo que te gustaba a ti tu nieto. Estarás disfrutando viéndolo crecer tan gracioso.

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