Querida mamá:
No sé cómo lo consigo pero al final me lío siempre haciendo
lo que no pensaba. Ayer al final me decidí por arreglar mi habitación. Ya está
todo ordenado y recogido. Por fin veo mi habitación bien. Pasaban los días y
como entre semana es más difícil que saque un hueco en la agenda…pues pensé que
mejor en domingo que parecía que iba a estar más tranquila.
Después comí algo rápido y me puse a escribir. Estuve desde
las 3 de la tarde hasta la una de la madrugada. Eso sí, haciendo descansos,
porque llegó papá, vino Carmenchu que vuelve a estar con fiebre, preparé la
cena y vi media película en tele cinco. Luego le mandé uno de los textos a
Miguel Janer. El que me parecía mejor…para que le echara un vistazo. Me llamo a
los veinte minutos para decirme que lo había leído por encima, pero que le
parecía bueno. Me dio sabios consejos, al menos me lo parecieron sobre la
estructura y la cabeza me volvió a fluir de tal manera que no puede dejar de
escribir ideas… y me dieron la una de la madrugada. Hoy no creo que pueda sacar
tanto tiempo. Seguramente dejaré la escritura para las noches. Es cuando más
tranquila y relajada estoy. Porque precisamente ahora tengo a Carmenchu
conmigo. Al estar enfermita, pues no va al cole y se queda conmigo. Así que difícilmente
pueda sacar cosas en claro…
Esta semana puede ser decisiva. Lo tenía que haber sido la
anterior, pero no lo fue. Sin embargo tengo de límite hasta el viernes para
algunas cosillas… esperemos que el tiempo corra de mi suerte mamita. Lo
necesito.
Te quiero. No me olvides. Ni a Pili.
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