Querida mamá:
Hoy es el cumpleaños de Fran, supongo que lo celebraremos el
próximo fin de semana…porque este va a estar un pelín complicado. Papá anda de cursos y el domingo vamos a hacer la carrera contra el cáncer en tu honor, ya que es tu día...
Pero hoy es un día especial para mí, hace 25 años que hice
la Primera Comunión. Ya no sólo porque recibiese al Señor por primera vez, que
también, sino porque hiciste que aquel día fuese mágico para mí. Lo recuerdo
todo a la perfección. Fuiste el primer año mi catequista en el colegio, el
segundo año hice la catequesis con Don Francisco Millán porque solicitasteis la
opción de que hiciese la Comunión un año antes que el resto de mis compañeras
por dos razones; primera porque mi hermano mayor se iba a estudiar fuera y
sería difícil que pudiese venir y segundo porque si no la hacía ese año, para
el siguiente iba a necesitar un traje de boda por lo “grande” que me estaba
poniendo y no de comunión.
Invité a todas mis compañeras. La hice en el oratorio de mi
colegio. Recuerdo como papá me llevó al colegio con muchas de mis amigas en la
furgoneta azul. La fiesta fue en casa… Vinieron los titos, los abuelos, los
primos, todos los padrinos, amigos vuestros…y prácticamente toda mi clase. Me
acuerdo a la perfección que me regalaron varios Pin y Pon, estuches pelikanes
que estaban de moda, algunas barriguitas que yo coleccionaba, dinerito que
empleaste para comprar ropa a mi hermano Fran que se iba a estudiar fuera,
recuerdo que la tita Estrella me regaló un elefante lleno de chocolatinas y dos
mil pesetas… los abuelos de los Barrios, abuelo Luis y Tata Concha me regalaron
un pijama rosa… recuerdo los playmobil que tanto me gustaban, la muñeca de
comunión, la virgen Niña que me la regaló mi amiga Mari Ángeles, una mochila
rosa… es que me acuerdo de todo mamita. Me acuerdo como me llevaste a tu cuarto…
tu cama la cubría una colcha verde. Allí estaba mi traje…mis zapatos, mi ropita
interior…me acuerdo como me peinaste con las dos colitas, como me pediste que
al sonreír no sacara el labio… porque me ponía muy fea. Te recuerdo pidiéndome
que te dijera la oración que tenía que decir y que recuerdo a la perfección “Yo,
Mercedes García Paine, renuncio a Satanás a sus pompas y a sus obras y prometo
seguir a Jesucristo y a su Iglesia para siempre…”. Me acuerdo de todo mamita
porque sin tener que ver con las comuniones que se celebran hoy en día, fue el
día más bonito de mi vida. Y sin duda, fue gracias a ti y a papá. Como pasa el
tiempo…
En fin mamita, en el día de hoy me dirán algo del hombro…no
te olvides por favor. Te estoy escribiendo en la madrugada del 2 al 3, porque
mañana mi despertar será con estrés por tema de tiempo…así que te dejo escrita
mi carta ya.
Te quiero mucho, no me olvides guapa. Ni a Pili. Te
necesita.
No hay comentarios:
Publicar un comentario