Querida mamá:
Hoy cumple tu nieta Carmen 6 añitos. Cómo pasa el tiempo…qué
rápido va todo. Esta noche iremos a la casa de Conchi para celebrarlo con la
niña y cantarle el cumpleaños feliz. La verdad es que este año, por las
circunstancias, me apetece celebrarlo con la niña.
Ya te he ido dando pinceladas de cómo es tu nieta y es que
tiene algo especial. Es una niña súper inteligente y madura para la edad que
tiene. Es muy consciente de todo lo que ocurre en la casa. A veces pienso que
no es justo por la edad que tiene, pero quiero creer que cuando sea mayor no se
acordará. Siempre que alguien pregunta cómo estamos ella responde “el abuelito
muy mal, siempre llorando” o de pronto estás hablando con alguien de la vuelta
al cole y te suelta un “yo ya lo tengo todo preparado, sólo me falta la bolsa
para guardar la pelota de E.Física”. Dime que niño o niña de 5 para 6 años te
dice el material que necesita de colegio o lo que tiene o deja de tener. Es muy
responsable y se le nota y aunque no deja de ser una niña, ¡menos mal! Sorprende
que sea tan madura para la edad que tiene.
Ayer pasé un mal rato en el cementerio. Intento aprender a
convivir con ese dolor, si por mi fuese no volvería a ir nunca, pero no es
justo que las personas sufran su dolor en soledad, porque no soy la única que he
perdido a un ser querido. Además, lo que he aprendido es que en esos momentos
de tanto dolor lo mejor es la compañía sin palabras. Yo no le dije nada a María
ni María del Mar, simplemente estuve, las abracé y besé varias veces y listo.
Porque yo recuerdo que las palabras que me decían algunas personas en el
cementerio me sentaban hasta mal. Nunca se sabe si aciertas o no diciendo algo.
Por eso yo prefiero el silencio en solidaridad al dolor que la persona sufre
por dentro, que eso sólo lo sabe la persona que lo sufre.
Por la noche ya, cerca de las 21:30 vinieron Carlos y Salvi
con sus respectivas familias para ayudarme a hacer la mudanza de las cosas más
pesadas del cuartillo verde al sótano. La verdad es que se me está haciendo
eterno el cambio, pero tengo que hacerlo y para ya. Los días pasan tan rápidos
que me parece mentira que estemos a dos semanas de acabar agosto. Cuando nos
demos cuenta, ya estoy de lleno de nuevo en el curso escolar.
Hoy más relajado el día por eso de ser festivo, aunque esta
tarde haré un examen a unos de mis alumnos que ayer suspendió y le voy a dar la
oportunidad de que apruebe hoy. Si suspende mañana no se irá con sus amigos al
parque acuático, pero si aprueba le dejaré ir. Depende única y exclusivamente
de él y como ayer me suspendió le he dado la oportunidad de hacerme el examen
hoy para dejarlo ir.
En fin guapa, voy a la comida. Hoy comeremos poco pero hay
que comer. He decidido hacer los garbanzos con calabaza y jamón que tanto te
gustaban. Es un plato que se puede tomar medio frio y al menos para el calor es
aguantable.
Sigue pendiente de todas mis peticiones mamá. Del cartero ya
es que ni lo menciono, ayer me crucé con él y me dijo que no han cubierto las
bajas ni vacaciones y que pasarán una vez en semana… ya me había dado cuenta de
ello, pero está bien saberlo. Así que como ayer vino y no me trajo la carta,
pues mínimo una semana más y como empieza la feria, pues ya quiero creer que no
habrá carta hasta septiembre, lo estoy viendo venir.
Acuérdate de Pili, papá, Isa, María, Cuñado, JJ y Carmenchu.
Todos os necesitan. Te quiero, no lo olvides ni te olvides de mí.
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