viernes, 27 de julio de 2012

28 de julio

Querida mamá: En que momento te has ido. Conociéndote estarías todo el día diciendo “la gente está loca” parece que te escucho decirlo. Es que no sabes lo mal que está el país. Desde mi punto de vista, y mira que soy una gran perjudicada, no mucho peor que lo dejó mi gran amigo ZP, pero como Rajoy ha sido el responsable de hacer recortes…pues ya es un sinvergüenza. Yo no sé cómo pensaba la gente que iba a arreglar España, se pensarían que tenía una barita mágica y que se iba a solucionar todo. A lo mejor es que no se daban cuenta de la gravedad de la situación hasta que han tocado sus bolsillos, algo que tenía que haber hecho el PSOE y no lo hizo. Y ahora el malo…Rajoy. Mira que nos gustaba poco, pero ahora me siento solidaria con él, porque esos miles de millones de parados que se quejan y que dicen no tener para comer, tienen tiempo para estar sentados en el ordenador, con Internet (que no sé cuál es la empresa que lo da gratis, porque todo el mundo lo tiene) y se dedican a inventar chistes y hacer dibujos que faltan a la dignidad de nuestro presidente de Gobierno. Luego nos quejamos de los franchutes, de los alemanes…y la cara que se les estará quedando si ven las redes sociales donde los españoles pasan su rato destripando a la persona que está intentando bajo su responsabilidad sacar el país adelante. Pero eso no les vale. Tu sabes que yo siempre he sido más bien de poca política… pero me enerva escuchar y leer y ver tantas tonterías de ciudadanos que muchos no saben ni lo que están “machacando” ya que son marionetas de las comisiones obreras. Total guapa, que menos mal que no estás pasando por esto…que ya sé yo lo que estarías tú pasando. Por cierto guapa, ¡se terminó la natación! Biennn. Ya no tengo que llevar a los niños a la piscina. Se acabó. Por cierto mamaíta, ayer me hablaron de algunas cosillas que simplemente no comparto. Me dicen que tu estancia en la tierra había terminado y que ahora te tocaba descansar. Y me hablaba de que debía dejarte ir. Que si yo estaba triste y seguía implorándote (entendí esto por mis cartas) no te ibas a poder ir a ser feliz. Yo permíteme que te diga mamá, pero lo voy a cuestionar. Supongo que estarás en un lugar privilegiado, viéndome y que seguro estarás preocupada de verme a mi triste, a papá. Pero tú misma sabrás que el lazo de unión que teníamos era tan fuerte que también era imposible que la tristeza desapareciera antes. No comparto que me diga que no te dejo ir. Sé que estás donde tienes que estar. No creo que estés en un sitio intermedio sufriendo porque yo sufro y sin poder disfrutar de tu merecida paz. Quiero creer que me ves, que me oyes, pero que tú ya estás perfectamente. Sino no tendría sentido nada… Quería que supieses que de momento voy a seguir escribiéndote. No siento yo que te esté perjudicando en nada. Y si lo hago, ya sabes, aprovecha uno de mis sueños y dímelo. Sino lo haces, doy por entendido que te gusta recibir mis cartas… Te quiero mucho guapa, muchísimo. Y cada día te echo más de menos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario