14 de octubre: Lo Imposible

Querida mamá: Anoche fui a ver Lo Imposible. Iba preparada porque había estado investigando por internet y me había metido en la web, escuchado entrevistas, leído artículos y visto fotos. Pero el sentimiento que me entró estando sentada en la sala es indescriptible. La película es puro sentimiento de tristeza, dolor y sobre todo impotencia. Sentía impotencia de pensar todo lo que allí ocurrió y que no se pudiera hacer más de lo que se hizo. Cada vez que imaginaba que podía ser uno de mis sobrinos uno de los tres protagonistas de sólo 5,7 y 12 años me venía abajo. No es justo que en la vida ocurran este tipo de cosas. Los avances tecnológicos de los que tanto vacilamos deberíamos saber emplearlos para conocer con tiempo estas cosas. Es duro perder todas las pertenencias, pero más duro es no volver a ver a tu familia por el arrastre de una ola. Creo que aquellos que investigan para seguir creando maquinitas, juegos y objetos que sirven para todo, deberían emplear su tiempo en buscar formatos para saber con antelación lo que podría ocurrir en tierras de alto riesgo. Sé que es fácil decirlo, pero también sé que yo no sé hacerlo y por eso no lo hago y entiendo que el que invente este tipo de artilugio que deteste una vez cada mucho tiempo que viene un stunami no ganaría lo mismo que el que invente la Nitendo JXLI que servirá para que millones de padres se embarguen y sus hijos tengan lo último en máquinas. No es lo mismo, cierto es. Pero para qué tantas maquinas de juegos…cuando millones de personas, entre ellos los niños que son los más débiles, fallecen a miles de kilómetros de aquí sólo por el hecho de haber nacido en África o Asia y no en Europa o América. Una pena la verdad. He conseguido localizar a las personas que realmente han padecido aquello. La familia española en la que está basada a película y que ha contado su historia. Te pongo su foto. Sólo quiero mamita que en el día de hoy centres todas tus fuerzas en consolar su angustia. Porque ahora no les faltará “detalle” para vivir, pero estoy segura que humanamente no hay quien sobreviva con felicidad medio plena tras haber visto, sufrido y vivido lo que allí ocurrió. Y supongo que revivirlo en la película no les debe hacer mucho bien. Por muy afortunados que se sientan de sobrevivir. Te ruego, les des fortalezas para que encuentren la serenidad necesaria para seguir disfrutando de esta vida de la mejor manera posible. Te quiero guapa, no me olvides.

Cartel de la película.

La familia que realmente ha sufrido lo narrado en la película. Son María, Quique, Lucas, Tomas y Simón.