domingo, 24 de noviembre de 2013

24 de noviembre: 18 meses sin ti...

 
Querida mamá:
Hoy hace 18 meses que no estás con nosotros. Hoy hace 18 meses que dejaste de acompañarme en mi batalla diaria. Aún te escucho cada cosa que me decías. Siempre dándome sabios consejos que nunca valoré como lo hago ahora. Anoche mismo te recordaba celebrando tus 44 años de amor con papá, te visualicé perfectamente, cada gesto, cada mirada, cada cosa que hiciste….porque por aquellos días lo eras todo para mí como lo sigues siendo ahora. Tardé mucho en valorarte y darme cuenta que eras el eslabón principal y más importante de mi vida. Sin ti y papá, nunca habría llegado a ser lo que soy.
Hoy, día de Cristo Rey miro al cielo como cada día y te recuerdo, porque tú eres la luz que me guías cuando busco una salida a mis problemas o acciones, porque en cada cosa bonita que me ocurre, en cada cosa mágica, como lo ocurrido el pasado miércoles con mis niños de la academia, sé que estás tú detrás, puedo sentirlo. Dejaste de estar a mi lado para entrar dentro de mi corazón.
Hace algunos meses, te decía lo mismo que sigo pensando ahora… diste tu vida por mí y mis hermanos. Fuimos tu prioridad junto a papá. Me enseñaste a sonreír aunque la tristeza me invadiera. Me ensañaste a que con tus tres besos, que tanto echo de menos, todo se curaba, me enseñaste a levantarme en cada caída por muy dura que fuera. Me enseñaste a diferenciar el bien del mal, a querer a mis hermanos por encima de todo “problema”, me enseñaste a respetar y amar a mi padre, pero se te olvidó enseñarme a vivir sin ti.
En estos 18 meses he aprendido a extrañarte con una sonrisa, he aprendido a abrazar más a la gente que amo, he aprendido a sentirte sin verte, a acariciarte sin tocarte, he aprendido a caminar mirando al cielo porque siempre estoy esperando tu señal. Me levanto cada mañana con esperanzas de hacer las cosas mejor, intento no guardar los sentimientos. Estoy aprendiendo a vivir con el dolor de tu ausencia porque vale la pena, teniendo en cuenta que es un dolor lleno de amor. Qué triste sería haberte perdido sin haberte amado ni disfrutado en vida. Al menos puedo decir que tuve a la mejor madre que se pueda tener y este vacío que me has dejado, es un gran vacío porque recibí mucho amor por tu parte. Estoy aprendiendo, aún me cuesta, a llorar sin ahogarme y que se puede ser feliz aún con lágrimas. Porque sé que no te gustaría verme triste. Tengo la certeza que cada día de bajón estás con tus manos puesta en jarra y esperando a que remonte. Hacías lo imposible por ayudarme a salir de cada uno de mis días malos…por eso sé que tú estás detrás de todo estas cosas bonitas que me están ocurriendo. Estoy segura que tú me estás empujando a cada paso que doy.
Son 18 meses sin ti, da igual los días y meses que pasen….tu ausencia nunca podrá suplirla nadie, tus abrazos son insustituibles pero me queda la paz de saber que estás ahí, que estás dentro de mí cuidandome y protegiéndome de cada cosa que hago en mi vida.
Aprovecha que es una fiesta grande para pedirle al jefe que cuide de Carmen, Papá y Pili. Que los proteja. Ellos os necesitan. Y de paso, una ayudita a cuñado y JJ.
Te quiero mucho mamita, no lo olvides ni te olvides de mí. Hoy miraré con más intensidad al cielo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario