5 de febrero: Sin enterarme del día mundial contra el cáncer...

Querida mamá:

Fíjate si estoy liada, que desconocía que hoy fuese el día mundial contra el cáncer. Había leído algo, pero desconocía el día. Aunque todos los días son para mi el día mundial contra el cáncer, porque no hay un solo dí que no desee que alguien encuentre, médicamente, la solución a este problema, también te digo que para aquellos que viven en otro mundo, no nos viene mal que se les recuerde de momento puntual. Ojalá, alguna empresa de las que decide invertir tanto dinero en nuevas tecnologías, o algún millonario de esos que tanto dinero tienen y que pueden comprar el mundo, quisieran donar parte de sus riquezas para que otros puedan seguir estudiando e investigando para dar por finalizada esta enfermedad. Te golpeó tan fuerte guapa, que no puedo dejar de sentir dolor continuo por lo vivido. Sabes que espero que Dios me de esa respuesta a la pregunta que tantas veces le hago. Aunque sé que te fuiste demasiado joven, también puedo llegara entender que decidiera llevarte a ti con los 70, pero no puedo llegar a entender ni lo haré porque te hizo sufrir de la manera que lo hizo. Y para no enfadarme con él, lo ofrezco por todas las cosas que quiero hacer por los demás, le pido fuerza para no volverme loca de pensar porque los médicos vieron tarde tu cáncer, porque el médico me dio esperanza de vida para cinco años y falleciste a los dos meses. Porqué tu médico no paso a verte en los últimos 15 días de vida teniéndolo que hacer otro compañero de papá para que te aliviara tu nerviosismo. Y por qué,,,por qué....por qué... quiero esas respuestas. Las necesito. Aunque sé que las voy a tener el día que me encuentre contigo y entonces no querré escuchar porque estaré ocupada en abrazarte y disfrutar del resto de nuestros días juntas, con los que más queremos y cuidando de quienes sigan viviendo en ese momento.
Hoy he tenido un día redondo, vamos, redondo redondo no. Que no he parado. Lourdes, que sé que estará leyendo la carta, me dijo que en la de ayer había cometido una falta de ortografía de las gordas. Y es verdad, así era. Anoche te escribí con fiebre seguro, me sentía mal de verdad y creo que es la única justificación al grave error ortográfico cometido. Le agradecí que me lo dijese.
Por la mañana me he despertado con mucha tos, dolor de garganta pero acelerada. He ido tarde desde que me he despertado. Menos mal que vuelvo a dejarte la carta escrita. La primera mala noticia desde el distrito, la subvención por la que tanto me he movido se me ha ido al garete todo en 2 minutos. Tengo casi todo mal y sobre todo mal planteado. Se me recortan los días y tengo hasta el día 12 para presentarlo en condiciones. Hoy me ha sido imposible. He llegado a casa desde esta mañana  a las 11:15 de la noche y ahora, después de escribirte debo acostarme, pues la primera reunión es a las 8:15 de la mañana. Pero además, aunque quisiera es que te digo, que después del día de hoy, no soy capaz de juntar dos letras seguidas. No sé cuándo, pero lo debo hacer.
Por otro lado guapa, hoy tu nieta María ha hecho la primera Confesión. Quería haber estado con ella, sabes lo importante que es para nosotros este día. Precisamente yo le decía a Conchi que recordaba todo cuanto había vivido en esa época y es porque lo hiciste especial. Recuerdo hasta el libro de los pitufos que me regalaste. Fue un día inolvidable.
En fin guapa, mañana tengo dos cosas importantes. Acuérdate de mi porfa!!. Te quiero mucho, lo sabes. No me olvides. Acuérdate de papá, Carmenchu, Isa, JJ, Cuñado, Pili y Papito.