martes, 11 de marzo de 2014
12 de marzo: Un pequeño ángel al cielo...
Querida mamá:
Hoy ha sido un día de fuertes emociones. Digamos que las reuniones no han ido mal, aunque tampoco bien. Mejor de lo que esperaba, peor de lo que quisiera. Es lo que tiene este mundo. Que nunca escucharé las palabras que me gustarían escuchar. Pero no me queda otra que seguir adelante, con paso firme, sin dejarme vencer... tengo que seguir.
En la asociación, digamos que las cosas no van mal, pero son muchos niños y mucha responsabilidad. Hoy, una alumna de primero de la ESO me la ha jugado. Se ha escapado antes de que yo supiese que había venido, pero un compañero me ha dicho que había visto como su padre la había soltado y de pronto desapareció. He estado dos horas, me faltaba el aire. Solo de imaginar que pudiera pasar algo. Encima, los típicos que hablan por hablar me decían que la habían visto subirse a un coche...me ha entrado los cuatro males. He movilizado a todo el mundo. He tenido que molestar a Conchi, llamar a profesores del cole, madres de otros niños en la calle buscándola...no sabes lo mal mamita.
Para colmo, se notaba la tensión acumulada de los niños. Estamos en el tramo final. Últimos exámenes decisivos para saber si los niños aprueban el trimestre o no. Alumnos nerviosos, otros estudiando, otros...simplemente vienen por venir. Pero no es el caso de la mayoría. Había dos voluntarios que se acercan a mi y me dicen "estoy por tirarme por la ventana" y le he respondido "lo hacemos juntos y así hacemos más ruido" y es que como te digo, la tarde ha sido intensa.
Además, hemos llegado con la noticia de la muerte de Iralia. Ella ha sido el reflejo del sufrimiento de miles de niños que luchan diariamente contra el cáncer. Es verdad que estadísticamente se dice que se salvan muchos más de los que fallecen, pero solo el dolor de la muerte de uno, hace que el sufrimiento sea fuerte. Parece mentira que esta cruel enfermedad pueda atacar a estos pequeños angelitos. Es duro ver como tienen que sufrir el tratamiento de la quimio, la radioterapia y ver que finalmente no es capaz de ganar la batalla. Aunque Iralia ya descansa, eso es seguro. Pero puedo llegar a imaginar el dolor de esos padres. Debe de ser terrible. En la asociación, todo el mundo hablaba de ello.
En fin guapa, te dejo la carta escita porque mañana se queda conmigo Merceditas. Me la dejan a las 8 de la mañana y me temo que no me dará mucho margen para hacer lo que yo quisiera y tengo que hacer.
Te quiero mucho, lo sabes, no lo olvides ni me olvides. Acuérdate de papá, Isa, Laura, Pili, JJ, Cuñado y Papito.
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