Querida mamá:
Hoy hace dos años que tu alma voló, dos años que te fuiste a
un lugar donde no existe ni el tiempo ni el espacio, solo luz y paz. Un lugar
en el que seguramente tendrás un sitio privilegiado, desde donde me sigues
cuidando y protegiendo tal y como lo hacías aquí… porque sigues conmigo.
Tengo mucho que aprender, pero sé que no debo llorar. Hoy es
un día que quisiera vivirlo recordando solo tus mejores momentos. Un día para sonreír
al recordar algunas de tus anécdotas. Hoy es un día para homenajearte y darte
las gracias por tanto y tanto.
Gracias por decidir darme la vida. Gracias por tu
amor incondicional a pesar de mis errores. Gracias por educarme en el amor.
Gracias por aguantar mis noches en vela siendo un bebe. Gracias por limpiar con
cariño mi culito cuando no existían pañales. Gracias por ayudarme a
desprenderme del chupete. Gracias por protegerme de quienes se reían de mi
sobrepeso, Gracias por cada disfraz diseñado con cariño, Gracias por tu
complicidad, Gracias por permitirme jugar al fútbol aun suponiendo para ti un
suplicio, Gracias por dejarme disfrutar del mejor baloncesto vivido en Málaga
con Juampi, el de Ciudad Jardín, Gracias por peinar mi pelo con tanto cariño
como lo hacías, Gracias por apoyarme en cada decisión tomada en mis estudios,
Gracias por estar a los pies de mi cama en todas y cada una de las veces que he
sido intervenida e ingresada, Gracias por tu paciencia, Gracias por tus
consejos, Gracias por “empujarme” a escribir, Gracias por levantar mi
autoestima en tiempos difíciles, Gracias por tus besos únicos, Gracias por tus
abrazos, Gracias por tus caricias, Gracias por todos y cada uno de los cumpleaños que me celebraste,
Gracias por hacer que el día de Primera Comunión fuese uno de los días más
felices de mi vida, Gracias por hacer especial mi mayoría de edad, Gracias por
tu discreción en mis temas más personales, Gracias por enseñarme a cocinar,
Gracias por quererme, Gracias por amarme, Gracias por dejarme compartir tu
enfermedad, Gracias por tu valentía, Gracias por tus lecciones de vida… Gracias
por tu corazón, Gracias por tu humanidad, Gracias por tu saber estar, Gracias
por tu protección, Gracias por permitir que el comienzo de mi película vital
esté llena de escenas preciosas en las que te veo y me haces sentir la mujer
más afortunada del mundo por haber formado parte de ti.
GRACIAS, GRACIAS Y GRACIAS.
Te quiero, no lo olvides. Acuérdate de papá, Isa, JJ, Cuñado
y Pili.
No hay comentarios:
Publicar un comentario